La zona denominada como “San Pedro de Atacama” corresponde al asentamiento que encabeza un territorio extenso y con una fuerte influencia de las culturas andinas. Ubicado geográficamente en la zona precordillerana, sus orígenes históricos se vinculan a su posición céntrica, en medio de los circuitos conformados por diferentes rutas que se despliegan entre el piso alto andino, los valles circundantes y el curso superior del Rio Loa.

La cultura likanantay o comunidades atacameñas se mantienen vigentes hasta hoy, con sus formas de vida tradicional junto a los oasis y quebradas del Río Loa y el Salar de Atacama, sin perder contacto con los centros urbanos y la sociedad chilena actual.

El museo arqueológico Gustavo Le Paige, ubicado en el poblado mismo de San Pedro de Atacama; lleva el nombre del distinguido sacerdote jesuita que dedicó casi toda su vida a la búsqueda, la recolección y el estudio de restos arqueológicos de la zona. En 1963, con la ayuda de la Universidad Católica del Norte, se inauguró el primer pabellón del nuevo museo, que aumentó actualmente a tres. Además, en 1991 nació, con aportes de Minera Escondida, la Sala del Tesoro, donde se exponen las piezas de oro.